Formato de ubicación de fuentes

FORMATO DE UBICACIÓN DE FUENTES

Memoria y Archivo de movimientos sociales e izquierdas en Colombia


Estimado colega:

Si conserva fuentes escritas, audiovisuales, entrevistas, o materiales sobre organizaciones o movimientos sociales le solicitamos diligenciar el siguiente formulario, en la perspectiva de consolidar la información necesaria para establecer las condiciones iniciales que se requieren para crear un Archivo de izquierda y Movimientos Sociales en Colombia.


Primero diligencie los siguientes datos personales.

1. DATOS PERSONALES
1 Nombre
2 Título o profesión
3 Institución a la que está vinculada(o)
4 Correo electrónico

Con el fin de facilitar el diligenciamiento de este formato a continuación encontrará una lista de tipos de fuente, de formato y de estado de conservación:

Tipos de fuente (oral):

  1. Entrevistas
  2. Testimonios directos de testigos presenciales
  3. Testimonios indirectos en los que se transmite la vivencia de terceros testigos presenciales
  4. Tradiciones orales (refranes, líricas populares, cuentos, mitos o historias familiares)
  5. Otros (especificar)

Formato

  1. Transcripción
  2. Grabación de audio en cinta magnetofónica
  3. Grabación de audio digital (especificar tipo de archivo)
  4. Grabación de video en formato Beta o VHS
  5. Grabación en video digital
  6. Otros (especificar)

Tipo de fuente (audiovisual: Documental, programa de televisión o radio):

  1. Fotografías
  2. Video sin editar
  3. Video editado
  4. Documental
  5. Programa de TV
  6. Programa de radio
  7. Publicidad
  8. Otros (especificar)

Formato:

  1. Foto
  2. Beta
  3. VHS
  4. DVD
  5. Otro (especificar)




Tipo de fuente (escrita)

  1. Libro
  2. Artículo
  3. Publicación educativa (cartilla, taller, etc.)
  4. Periódico
  5. Comunicado
  6. Carta
  7. Documentos propios de organizaciones (estatutos, decretos, etc.)
  8. Otros (especificar)

Formato

  1. Físico (especificar)
  2. Digital (especificar)

Estado de conservación

  1. Original o única copia
  2. Estado en que se encuentra la fuente (responder: excelente, bueno, regular o malo)
  3. ¿Está en riesgo de perderse por falta de estado, falta de espacio, etc. (responder si o no y especificar el motivo)


2. DATOS GENERALES DE LA FUENTE
1 No. (cantidad)
2 Persona, organización o movimiento al cual hace parte la fuente
3 Título de la fuente
4 Investigación o proyecto del cual hace parte la fuente
5 Fecha de producción de la fuente
6 Tipo de fuente
7 Formato
8 Estado de conservación
9 Ubicación actual
10 Observaciones

Acta 02 Discusión del procedimiento y criterios para la construcción de una política de la memoria de los movimientos sociales y la izquierda

Acta 02

Memoria y Archivo de los movimientos sociales y de izquierda en Colombia

Día: 16 de abril de 2009

Hora: 2:25 p.m.

Lugar: CINEP

Asistentes:

Alfonso Torres Carrillo, Universidad Pedagógica Nacional/Dimensión Educativa

Álvaro Frías Cruz, Dimensión Educativa

Fernando Torres, Dimensión Educativa

Juan Carlos Celis Ospina, Universidad de Antioquia

Luis Sandoval, ISMAC/Democracia hoy

María Tila Uribe, Centro de Estudios e Investigaciones del Trabajo (CESTRA)

Mauricio Archila Neira, CINEP/ Universidad Nacional

Miguel Ángel Urrego, Red para el Estudio de la Izquierda en América Latina (REIAL)

Miguel Eduardo Cárdenas, Centro Estratégico de Pensamiento Alternativo (CEPA)

Norma Moreno González, Dimensión Educativa

Rosario Arias, Historia, memoria y palabra/Universidad Nacional

Orden del día:

  1. Formato de registro de los archivos.
  2. Discusión del procedimiento y criterios para la construcción de una política de la memoria de los movimientos sociales y la izquierda colombiana.
  3. Fortalecer el comité de impulso.

Desarrollo:

En virtud de que asisten nuevas personas e instituciones se hace una presentación de la propuesta y lo avanzado hasta el momento, por parte de Mauricio Archila y Juan Carlos Celis. Y las personas que llegaban por primera vez se presentaron y manifestaron sus expectativas frente a la propuesta.

Fernando Torres: Presenta el proceso que viene llevando acabo Dimensión Educativa, de un archivo de experiencia de educación popular y teología de la liberación, que recoge el archivo de Golconda, Gonzalo Zavala y Camilo Torres Restrepo, que se encuentra disperso en La Habana, México, Lovaina, Buenos Aires y Colombia. En esta tarea se ha hecho contacto con Archiveros sin Fronteras de Barcelona y el Museo Che Guevara. Están buscando financiación y se están articulando a la Red de Archivos en Teología de la Liberación y Educación Popular.

A Dimensión Educativa le interesa que se cree un catalogo único de los distintos archivos que existen o se creen.

Norma Moreno González: Presenta la experiencia de Escuela Nacional de Historia y Antropología (ENHA) en México, que recopila, resguarda y vuelve archivo documentos de distinto orden de los movimientos sociales mexicanos, y coordina una red de archivos.

Propone que cada institución designe personas concretas para participar en la propuesta.

Miguel Eduardo Cárdenas: Presenta la intención de CEPA de aportar a la propuesta, comenzando por objetar el que se haga de la izquierda un archivo, cuando la función de un espacio como estos es hacer la reflexión de la historia y el rescate de la memoria, un recurso para el debate y la acción de la izquierda hoy.

En CEPA convergen el Instituto Nacional Sindical (INS), Cedetrabajo, intelectuales anarquistas como Cristóbal Silva, Alfredo Burbano

Propone: hacer un catalogo de la historia de la izquierda en Colombia; levantar una bibliografía de los 7 hombres y mujeres mas relevantes de la izquierda en Colombia. Realizar un documento maestro sobre la izquierda en Colombia, para actuar sobre el presente.

Relata que Víctor Manuel Moncayo viene trabajando el archivo de Orlando Fals Borda; C. Sarmiento a Luis Vidales; Luz Ángela Muñoz hizo una tesis titulada el Obrero Ilustrado, que se basa en un estudio de los periódicos obreros y de izquierda en la década de 1920; la Universidad de Wisconsin ha trabajado sobre la nueva izquierda en América Latina, y en Colombia Cesar Rodríguez de la Universidad de los Andes. Hay personas que tiene archivos o los han trabajado, como Renán Vega Cantor, que esta pronto a publicar la historia de la Unión Sindical Obrera; José María Rojas, el Archivo Rengifo; el Banco de la República en Montería, el archivo que construyo Orlando Fals Borda para escribir La historia de la Costa; Cedetrabajo viene trabajando en el de Raúl Eduardo Mahecha; Ricardo Sánchez el archivo de Ignacio Torres Giraldo. También menciona el seminario Marx Vive, que coordina Jairo Estrada Álvarez, que va para su sexta versión, y que tiene una financiación de la Fundación Rosa Luxemburgo que tiene cede para los países andinos en Quito, y al cual se le podría presentar un proyecto, como el que se esta discutiendo y construyendo.

Se hace la pregunta de cómo articular la propuesta en discusión a REIAL.

María Tila Uribe: Manifiesta su interes por rescatar la casa María Cano en Medellín, que el municipio de Medellín esta interesada en adquirir en tanto organizaciones de la sociedad civil la pongan a funcionar. Por lo piensa de que se debe crear una plataforma de organizaciones populares para éste objetivo.

Plantea como el archivo de Tomás Uribe Márquez se encuentra en alguna entidad militar, producto de un allanamiento que le hicieron ya hace unos lustros, y se le llevaron un baúl donde incluso habían brazaletes de los tres ochos y banderas del PSR.

Después de publicado Los años escondidos, le han llegado datos de archivos de distintos sitios del país. Como por ejemplo en Santander hay documentos sobre el paso por allí de María Cano, y en Caldas de Tomás Uribe Márquez. Stella Piedrahita tiene 60 fotografías del PSR (Luis Sandoval dice que el ISMAC las compro)

Alfonso Torres Carrillo: Propone hacer un proyecto para Sephis. Y anota como el Museo de Historia Social ene le pasado microfilmo el archivo de la Central Obrera Boliviana, dejando una copia y obviamente la organización de ese archivo en Bolivia.

Propone también desde este espacio trabajar con el Observatorio Social de América Latina de CLACSO, que actualmente coordina en Colombia la ENS.

Miguel Ángel Urrego: Pone a disposición la reunión de la REIAL de octubre en Guadalajara para que se fortalezca la propuesta, y de que se estudie para el 2010 realizar el congreso de la REIAL en Colombia, y propone en específico para el desarrollo del archivo.

  • Elaborar un Diccionario, como punto de clasificación de información de conceptos, personajes, acontecimientos. Este se construiría en red.
  • Digitalización de fotografías, periódicos, etc.
  • Crear página web, para lo cual ofrece la que viene creando la REIAL, haciendo una ventana para la propuesta de Archivo.
  • Definir una línea editorial, para lo cual REIAL ya viene avanzando, p. ej. con el CINEP.
  • Crear un equipo de recolección de fuentes.
  • Organizar un catalogo de tesis sobre el tema.
  • Realizar eventos académicos.

Ofrece desde la Universidad Michoacana, la posibilidad de gestionar becas de posgrado para desarrollar tesis relacionadas con el tema.

Los demás asistentes, que habían participado ya en la primera reunión, muestran la satisfacción por la participación de nuevas personas e instituciones, y el enrequicimiento del horizonte, y llegan al consenso con los nuevos participantes, que es necesario elaborar un proyecto para sirva de ruta e instrumento para la consecución de recursos y establecer relaciones con distintas instituciones. En relación a esto se llega a las siguientes conclusiones.

Conclusiones:

  • Se constituyen tres equipos que harán circular un documento borrador de los temas a los que se dedican, con una semana de anticipación a la próxima reunión, y que buscan configurar un proyecto:
  1. Equipo de redacción de política de memoria de los movimientos sociales y la izquierda en Colombia: Alfonso Torres, Mauricio Arhcila Neira, Miguel Ángel Urrego.
  1. Equipo de elaboración del formato de registro de los archivos: Rosario Arias, Norma Moreno González y Carlos Mario Betancur.
  2. Equipo de balance de organizaciones nacionales e internacionales interesadas: Juan Carlos Celis, Luis Sandoval, María Tila Uribe, Miguel Eduardo Cárdenas.

    • Se hará una propuesta para administrar la casa María Cano, en tanto la adquiere el municipio de Medellín.

  • La próxima reunión se realizará el jueves 4 de junio de 2009 en las instalaciones del CINEP, a las 5 p.m.

La reunión concluye a las 4:20 p.m.

Juan Carlos Celis Ospina

Relator.

Acta 01 Presentación de la propuesta y Discusión de alternativas

Acta 01

Archivo de los movimientos sociales y de izquierda en Colombia

Día: 9 de marzo de 2009

Hora: 2:30 p.m.

Lugar: CINEP

Asistentes:

Álvaro Delgado, CINEP

Carlos Alberto Garay, ACOTV

José María Rojas, Universidad del Valle

José Mariño, CILEP/Universidad Nacional

Juan Carlos Celis Ospina, Universidad de Antioquia

Klaus Meschkat, Universidad de Hannover

Luis Sandoval, ISMAC/Democracia hoy

Mauricio Archila, CINEP/ Universidad Nacional

Maria Angélica Tamayo, memoria y palabra/Universidad Nacional

Pilar Rey Hernández, memoria y palabra/Universidad Nacional

Ramiro Gutiérrez, Asesor ANUC

Rosario Arias, memoria y palabra/Universidad Nacional

Orden del día:

  1. Presentación de la propuesta
  2. Discusión de alternativas

Desarrollo:

  1. Presentación de la propuesta

Se inicia la reunión con una presentación de la propuesta por Juan Carlos Celis y Mauricio Archila, a renglón seguido se lee el documento de Oscar Calvo titulado “Fondo de la Historia de los Movimientos de Izquierda y los Movimientos Sociales en Colombia”. Luego se pasa a la discusión de la propuesta.

  1. Discusión de alternativas

Luis Sandoval: Centra su intervención en la viabilidad de la propuesta, comenzando por su naturaleza jurídica de un fondo como el propuesto por Oscar Calvo, es decir, si este sería privado o público. Y cita como ejemplo los casos de archivos públicos como el Jorge Eliécer Gaitán y otro en Italia, y uno privado en Holanda, el Museo y archivo de la historia social. Se pregunta por la financiación, y propone elaborar un proyecto para gestionarlo con la cooperación internacional.

Otras preguntas que hace Sandoval son ¿Qué es lo que queremos recoger? ¿Qué quiere decir izquierda?, ante lo cual lista movimientos sociales, de protesta, de resistencia, y se pronuncia por un concepto de manifestaciones societales, que abarque izquierda social e izquierda política.

Luis propone para comenzar hacer un inventario, responsabilidad que asumiría un grupo de personas o institución, y a partir de la cual se pueda diseñar un proyecto, decantando una serie de discusiones.

A su vez ofrece el archivo que el ISMAC (Instituto Sindical María Cano) tiene de movimientos sociales de la década de 1920 y de 1970. A su vez se pregunta ¿Dónde quedo el archivo de la Unión de Trabajadores de Colombia?

Por último se refiere a la necesidad de trabajar por recuperar para la memoria la casa de María Cano en Medellín, e incluso una casa en Bogotá, donde ella vivió unos seis meses con Ignacio Torres Giraldo, una casa en el barrio La Candelaria y que Belisario Betancur sabe exactamente cuál es (en la Carrera 4 entre calles 12 y 13).

Álvaro Delgado: Empieza por plantear que la tendencia de la izquierda es no guardar la memoria, y en esta propensión se incluye, y cita como por ejemplo como perdió las cartas con Jacobo Arenas, porque no había donde guardarlas. Igualmente cita como la Confederación Sindical de Trabajadores de Colombia (CSTC) boto su archivo. Para él se trata de una tragedia, la de la memoria, que es necesario rescatar.

En el pasado se ha conversado con Jorge Orlando Melo cuando era director de la Biblioteca Luis Ángel Arango, y Carlos José Reyes cuando era el director de la Biblioteca Nacional.

Comparte con Sandoval la necesidad de realizar un proyecto para gestionarlo con Colciencias y ONG internacionales.

Ramiro Gutiérrez: Señala como los archivos de los movimientos sociales y de izquierda está en manos de particulares. Muchos militantes de la década de 1970 guardan materiales de archivo como reliquias.

Sobre la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC) existen archivos dispersos, en manos de particulares, en buena parte por miedo a la represión. Además se han botado muchos archivos.

María Angélica Tamayo: Plantea la necesidad de un solo criterio de catalogación, así como de un lugar adecuado para el archivo. Se manifiesta partidaria de que el Estado garantice la conservación del archivo.

Klaus Meschkat: Recuerda como en 1973 en Chile antes del golpe, Luis Vitale sugería la necesidad de establecer una política de la memoria del movimiento obrero. Desde entonces esa ha sido una preocupación de Klaus, quien señala tres problemas ha enfrentar por la presente propuesta en Colombia:

    • Donde guardar el archivo: En Argentina y Alemania se han presentado iniciativas privadas semejantes, pero se han visto en la necesidad los archivos al Estado, pero ha surgido el problema de la confianza en el éste. Aún así los archivos públicos aseguran seguridad y accesibilidad pública.

    • Buscar instituciones y personalidades con gran prestigio y confianza que presten el nombre y algunos su tiempo para impulsar la propuesta.

    • Es imprescindible que los movimientos sociales se vinculen al proyecto.

José María Rojas: Indica como el documento de Oscar Calvo pese a ser un valioso instrumento para iniciar el debate, requiere organizarse mejor, de forma más lógica, comenzando por los objetivos, antes que terminar con ellos.

Propone constituir un comité de gestión constituido por personalidades académicas y representantes de organizaciones sociales. Dadas las circunstancias actuales se requiere avanzar hacia una institucionalidad.

Para iniciar se requiere realizar un inventario.

Mauricio Archila: Afirma que en cuanto a la historia social y desde abajo no se cuenta en Colombia con mucha documentación. De otro lado, argumenta como en comparación a países como Argentina o Brasil en Colombia no nos encontramos en el momento de la memoria, aunque los movimientos sociales vienen asumiendo el tema de la memoria, el trauma esta todavía vivo. La misma respuesta a la convocatoria de la presente reunión no fue muy grande. Existen muchas dificultades, el Centro Gaitán no esta interesado, el Archivo General de la Nación tiene un manejo autónomo pero habría que ver que tanto se podrían interesar en la propuesta.

En el CINEP hay un archivo de la ANUC pero no aparece, el archivo de prensa se lo estaban comiendo los bichos. La voluntad del CINEP se ceder su archivo de movimientos sociales y de izquierda a una institucionalidad que se cree, pues el CINEP mismo tendría dificultades para asumir desde su razón social una propuesta como la que hoy se discute, de igual manera las universidades públicas tienen muchos obstáculos para liderar una iniciativa del corte de un archivo.

Carlos Alberto Garay: Desde ACOTV se ofrece un archivo en video y audio de 50 años de historia de Colombia, en principio se han tocado dos puertas, la Universidad Nacional y la Universidad de Antioquia (a través del coordinador del pregrado de Ciencia Política), y la propuesta consiste en que se haga un transfer a DVD para que ACOTV quede con una copia, y para hacerlo más accesible al público. Entre el material con que se cuenta están las grabaciones de los diálogos del Caguán. También y el gobierno venezolano y TeleSur están interesados.

José Mariño: Manifiesta la disposición del CILEP para ubicar información, y activar sus enlaces con el anarquismo ortodoxo en América Latina.

Rosario Arias: Señala que si hay recursos para una propuesta de esta naturaleza, en el Distrito Capital, un poco en las Universidades. Propone invitar también a organizaciones de victimas como MOVICE y Nunca Más.

Manifiesta la necesidad de empezar a ubicar las fuentes, y proponen el formato que tiene “Historia, memoria y palabra” para adecuándolo empezar la tarea de inventario.

Mauricio Archila: Informa como el Distrito Capital tiene planeado para el 2010 realizar distintas actividades en relación a la memoria de las víctimas.

Vuelve sobre el tema de la memoria, y propone la necesidad de diseñar una política para el auge de ésta.

Propone que no se entre a calificar el archivo, y que se tenga un concepto amplio de izquierda y movimientos sociales.

Expresa la necesidad de que Juan Carlos Celis siga liderando.

Acoge el ofrecimiento de “Historia, memoria y palabra” de ajustar su formato para iniciar el inventario.

Señala que aún no es el momento de la institucionalización de la propuesta.

Sugiere indagar también con la Biblioteca de la Universidad Javeriana.

Klaus Meschkat: Solicita no dejar de la do a los lideres de izquierda, y proceder a conformar un comité de impulso con los asistentes.

Ramiro Gutiérrez: Propone construir un instrumento para abordar a las fuentes vivientes a través de entrevistas; definir un política de la memoria de los movimientos sociales y de la izquierda; precisar una presentación de las fuentes y diseñar estrategias.

Conclusiones:

  • Se acuerda que la próxima reunión sea el jueves 16 de abril de 2009 a las 2 p.m. en el CINEP.

  • Las compañeras de “Historia, memoria y palabra” harán circular previo a la reunión el formato de registro, para tomar una decisión el 16 de abril.

  • Se propone aumentar la lista de direcciones y de distribución para el 16 de abril.

  • El 16 de abril se avanzara en el procedimiento y criterios para la construcción de una política de la memoria de los movimientos sociales y la izquierda colombiana.

  • Para la reunión del 16 de abril se propone fortalecer el comité de impulso, que de momento queda conformado por los asistentes a la reunión.

  • Se continuarán los acercamientos con el Archivo Distrital, el Archivo General de la Nación, la Biblioteca Nacional, la Biblioteca de la Universidad Javeriana.

La reunión concluye a las 4:45 p.m.

Juan Carlos Celis Ospina

Relator.

Contribución a la discusión. propuesta fondo de la Historia de los Movimientos de Izquierda y los Movimientos Sociales en Colombia

Fondo de la Historia de los Movimientos de Izquierda y los Movimientos Sociales en Colombia

Contribución a la discusión práctica sobre la política de la memoria de la izquierda en Colombia. Documento dirigido a las organizaciones sociales y a los investigadores.

Óscar Calvo

El Colegio de México

Presentación

Diversos grupos de académicos y activistas políticos han estado discutiendo la idea de crear un archivo de los movimientos de izquierda y los movimientos sociales en Colombia, análogo a otros del mismo tipo que existen en Argentina, México, Francia y Holanda, y que tienen una función política, patrimonial y académica.

Hay consenso sobre la importancia que tiene un proyecto de este tipo desde el punto de vista histórico y político. Es urgente impedir que materiales con valor histórico se dispersen, se destruyan o sean enajenados por instituciones académicas de otros países. Este sólo hecho, un hecho de tipo material, tiene amplias repercusiones en el campo de las luchas simbólicas por el poder. Hoy el tema de los derechos humanos y las memorias de las víctimas merece alguna —aunque no suficiente— atención del público. Pero no ocurre lo mismo con los proyectos políticos y sociales disidentes, de manera que vale reclamar un sentido más político y no sólo humanitario en la historia social de los movimientos de izquierda (las izquierdas) y los movimientos sociales. Otro tanto puede decirse sobre la relación entre historiografía y memoria social, pues a pesar de que la historiografía académica ha sido pluralista desde los años setenta, y ha tenido una notable influencia del marxismo, hay una marcada estigmatización de la heterodoxia política en las representaciones sociales. Hoy más que nunca parece necesario reclamar un espacio legítimo para las memorias disidentes.

La idea de crear un archivo de las izquierdas y lo movimientos sociales en Colombia puede ser justificada de muchas maneras, bien por exigencias políticas del presente, por curiosidad científica o por la necesidad de preservación del patrimonio. Esta idea no es nueva, pero hasta ahora no se ha traducido en instituciones y prácticas que permitan materializarla. En este documento, a manera de programa de trabajo, nos concentramos en los aspectos de técnica y organización, sin entrar a problematizar y justificar la idea desde el punto de vista histórico y político. En otras palabras, se tiene por un hecho dado la necesidad del proyecto, sin preguntar por qué. En cambio, nos concentramos en el cómo, con la aspiración a contribuir de manera positiva a las iniciativas que se están discutiendo en diversos ámbitos académicos, sociales y políticos.

Para el efecto, partimos de la distinción entre el programa y el fondo material. El programa no es un fondo de materiales históricos en sí mismo sino el manual de instrucciones para un proyecto colectivo de mediana duración. Este establece las condiciones mínimas para que diversas personas, familias, y organizaciones puedan contribuir en diferentes tiempos y de acuerdo a sus propias necesidades y aspiraciones, en la construcción de un acervo histórico colectivo y de consulta pública. El fondo es el resultado práctico de la participación en un programa colectivo, cuyos legados materiales reposan en una institución especializada que puede ser garante de la conservación y el acceso del público a la información. Mientras estas funciones quedan en manos de dicha institución, corresponde a las organizaciones realizar proyectos a pequeña escala que permitan la elaboración de las herramientas de acceso y la difusión de la información de cada uno de las secciones o componentes del fondo.

Planteamiento general

La idea de formar un fondo parte del supuesto de que diversas personas, familias u organizaciones ceden en uso o donan un legado histórico particular —colección privada— para constituir un acervo histórico colectivo y de consulta pública. Si la intención es constituir un fondo con materiales de valor histórico, resulta claro que lo más importante es construir confianza entre quienes los poseen actualmente para donarlos o cederlos en uso a una institución que garantice su conservación y consulta pública. Por eso también es pertinente considerar las condiciones para que la conservación, la consulta y la difusión —o la confidencialidad, en determinados casos— de dichos materiales estén garantizadas.

De acuerdo al ejemplo del Cono Sur se ha pensado que la custodia de los materiales históricos, la elaboración de herramientas de acceso y difusión públicas, debe realizarse por instituciones privadas o no gubernamentales. Esto se explica por el papel que han desempeñado los regímenes dictatoriales y oligárquicos en América Latina, quienes desde el Estado y en diferentes contextos históricos, han buscado también controlar las representaciones sociales y la memoria colectiva como parte de una política de corte autoritario. También en Colombia personas, familias u organizaciones que podrían enriquecer con sus legados un archivo de este tipo, tienen una desconfianza comprensible de entregar cualquier legado para convertirlo en patrimonio nacional, pues en muchos casos han luchado contra el propio Estado o han sido víctimas de los crímenes del Estado.

Sin embargo, desde otro punto de vista, hay dificultades notorias para establecer en el corto plazo una institución privada o no gubernamental que tenga como funciones la preservación, clasificación y difusión del legado histórico de los movimientos de izquierda y los movimientos sociales en Colombia. Las dificultades más notorias son: a) la gran cantidad de recursos y energía que demanda la creación y consolidación de cualquier institución; b) la desconfianza de los posibles donantes de que sus legados sean enajenados y terminen tarde o temprano en manos de terceros; c) las múltiples interferencias burocráticas y políticas que pueden minar la en el mediano plazo la capacidad de cumplir con sus objetivos; y d) los altos costos que demanda cumplir con medidas especiales de seguridad y conservación de algunos materiales que por su valor testimonial, histórico o simbólico pueden ser alterados, robados o destruidos por motivos políticos; e) la posibilidad de que los materiales conservados no lleguen a ser clasificados, el acceso del público —por razones de personal y horarios— y su difusión sean limitados. Existe la posibilidad de establecer el archivo en una universidad pública, institución que por su trayectoria histórica y autonomía relativa podría constituirse en un punto medio entre el Estado y las organizaciones no gubernamentales. Pero en la actualidad no existen las condiciones institucionales, técnicas y financieras para la adecuada conservación y difusión de este tipo de archivo en las universidades públicas.

Frente a tales dificultadas, sugerimos dedicar la mayor cantidad de energía y recursos posibles a los procesos de clasificación y difusión que permiten el conocimiento del público, mientras que las tareas de conservación y acceso al público quedarían en manos de una institución pública especializada. La alternativa propuesta es elaborar un programa a mediano plazo, a través de acuerdos y contratos legales, que combine la consecución, la sistematización y difusión de los materiales históricos por medios privados o no gubernamentales, con la conservación y el acceso al público en una institución pública (archivo ó biblioteca). De esta manera, la programación inicial queda en manos privadas, mientras los soportes materiales quedan bajo el resguardo de una institución especializada para ser consultados por el público. Los acuerdos o contratos legales establecidos deberán asegurar, si es el caso, un control limitado por parte del Estado—en el tiempo y en el uso de los materiales— y sujeto la evaluación de la ciudadanía. También los acuerdos y contratos legales deberán servir para regular las relaciones entre las partes en el periodo de construcción del fondo, en el entendido que a mediano plazo, en tiempos establecidos por los propios donantes y con base en acuerdos particulares, este material podría llegar a convertirse en patrimonio nacional.

Objetivos

El objetivo general es crear un fondo histórico en una institución pública especializada, constituido por materiales en formato manuscrito, sonoro, visual, audiovisual y electrónico, procedentes de colecciones particulares y que constituyan un legado histórico sobre los movimientos de izquierda y los movimientos sociales en Colombia. La conservación y acceso al público de los materiales estará a cargo de una institución pública, mientras la consecución de las colecciones, la elaboración de las herramientas de acceso público y la difusión de información se realizarán por medio de organizaciones no gubernamentales en coordinación con dicha institución.

Son objetivos particulares del programa, en orden metodológico y no por su importancia:

1) Construir una plataforma de trabajo conjunta entre diversas organizaciones no gubernamentales, de carácter académico, cultural y de derechos humanos, guiada por el objetivo general y capaz de hacer efectivos los objetivos particulares de este programa.

2) Establecer un acuerdo de cooperación con una institución pública especializada en el cual puedan ser donadas o cedidas para su uso colecciones privadas, que garantice la conservación y el acceso público adecuados de los materiales históricos.

3) Realizar un censo entre las organizaciones, familias y personas para conocer la cantidad, los formatos y los tipos de materiales de colecciones privadas que podrían incluirse en el programa. Este censo se deberá realizar en Colombia y en el exterior, a través de una convocatoria pública, empleando todos los recursos técnicos disponibles.

4) Establecer criterios archivísticos y técnicos comunes, basados en la normativa archivística internacional, para la selección e incorporación de las colecciones privadas.

5) Coordinar, a través de organizaciones interesadas en participar en el programa, la gestión y ejecución de proyectos de pequeña escala para la incorporación al fondo de colecciones privadas. También velar para que en el fondo se conserve la entidad individual de cada colección recibida, de manera que se respete el principio de procedencia y el “orden natural” de la información.

6) Contribuir a la repatriación de materiales de valor histórico conservados en otros países, como medio para la valoración de la experiencia del exilio político colombiano en el mundo.

7) Evaluar los términos de convenios o contratos que deberían ser establecidos entre quienes poseen las colecciones y la institución pública especializada donde estaría el fondo, con el fin de facilitar una donación o cesión temporal de los materiales. Estos convenios o contratos se realizarían de manera individual, de manera que los términos de uso y las condiciones de acceso a la información puedan ser definidos según los intereses de quienes contribuyan con sus colecciones al fondo.

8) Suscitar el debate público sobre el significado de estas fuentes históricas y generar su valoración crítica por los ciudadanos colombianos, así como estimular su conocimiento entre las nuevas generaciones y contribuir a la ampliación de la memoria social de la humanidad.

9) Establecer un mecanismo permanente de veeduría ciudadana para el buen funcionamiento del fondo.

Procedimiento

Mientas en su diseño este programa es de carácter algo abstracto, su aplicación es práctica y sencilla. Para decirlo de manera clara, se propone a diversas organizaciones políticas y sociales que establezcan una plataforma común sobre política de memoria histórica, en términos prácticos, en referencia al tratamiento archivístico de los legados materiales de los procesos sociales y no necesariamente a las interpretaciones de los procesos sociales en sí mismos. La plataforma debe establecer unos criterios colectivos para proceder en materia de conservación, acceso público y difusión de colecciones privadas, durante un periodo de tiempo preestablecido. En un principio pueden adoptar esta plataforma unas pocas organizaciones y otras pueden integrarse cuando sean visibles los resultados. Para el efecto no es necesario constituir una nueva institución.

Los objetivos sugeridos con anterioridad constituyen propuestas para establecer esos criterios y guías de las tareas que pueden ser emprendidas. El acuerdo con una institución especializada, archivo o biblioteca, constituye un punto medular por cuanto es garantía de contar con los elementos necesarios para la conservación y acceso al público de la información. Además puede funcionar como un árbitro, sujeto a reglas y leyes para el tratamiento de materiales de este tipo, que puede evitar posibles conflictos por la apropiación o uso inadecuado de los legados que son confiados para constituir el fondo. La realización de un censo de los materiales disponibles, debe servir para valorar en su conjunto los proyectos puntuales que pueden ser desarrollados a corto, mediano y largo plazo para constituir el fondo. Así, la parte medular de la propuesta implica que la incorporación de colecciones privadas sea realizada por las organizaciones no gubernamentales a través de proyectos específicos de pequeña escala, para establecer objetivos puntales y evaluar sus resultados de manera efectiva.

La mayor difusión del fondo a través de la tecnología constituye el elemento clave del programa. Asegurar las condiciones de conservación material en una institución especializada, permitiría dedicar mayores recursos a la comunicación de la información. De hecho, muchos materiales pueden ser difundidos sin necesidad de ser concentrados en sólo fondo. Pero cabe aclarar que se descarta por principio la idea de construir sólo un archivo virtual mientras los materiales se encuentran físicamente dispersos, pues aquí también concedemos un valor importante a la preservación material de los legados y no sólo a la información textual que contienen.